A JOSU LE GUSTA..
Me gusta que salga un día luminoso, de estos con luz pero sin mucho calor.
Me gusta levantarme pronto y descansado para aprovechar el día.
Me gusta quedarme levantado hasta tarde, agotar las horas.
Me gusta pasar la noche en la calle, recorrer las calles vacías de madrugada.
Me gusta estar con los colegas, charlando de algo más que tetas y culos.
Me gusta que mis amigos no sean unos fanáticos del fútbol, porque cualquiera los aguantaría
Me gusta mi novia.
Me gusta beber cerveza, ron, algún bourbon que otro y el vodka, preferentemente
Me gusta ir de bares, escuchar música y hablar con la gente
Me gusta el ROCKANROL; así, en mayúsculas.
Me gusta ir a un concierto; da igual de quien, la música es en directo o no es.
Me gusta leer a solas, en mi casa.
Me gusta inventarme historias cuando voy por la calle andando solo
Me gusta pasear solo
Me gusta hablar con la gente, me gusta polemizar con todo Cristo.
Me gusta el cine
Me gustan las mujeres (qué se le va a hacer), casi todas...
Me gustan sentirme deseado
Me gusta halagar y agradar, sobre todo a las mujeres
Me gusta escribir alguna de esas historias que me invento cuando ando solo
Me gusta dibujar
Me gusta sentarme en la hierba, sintiendo la brisa y escuchando el paisaje
Me gustan los días de lluvia, cuando cesa de llover y todo huele a limpio
Me gustan los árboles, el monte, la hierba
Me gusta el mar, rompiendo en unos acantilados desiertos
Me gusta el murmullo del agua de un río
Me gusta nadar, meter la cabeza bajo el agua y disfrutar del sonido ahogado del exterior
Me gusta el sexo, solo o con otros
Me gusta el sexo con mi novia (afortunadamente)
Me gusta que me hagan masajes y hacerlos
Me gusta el café
Me gusta tomarme un café con un amigo o amiga, charlar del mundo y echar un pito
Me gusta vivir
Me gusta pensar que no todo está perdido
Me gusta bailar
Me gusta sentir pena, llorar por cualquier cosa; cuando no pueda hacerlo, estaré muerto
Me gusta viajar, conocer diferentes sitios, gentes
Me gusta comer, me encanta comer
Me gusta cocinar para otra persona y aún más para mí
Me gusta pasear por el cementerio
Me gusta sonreír y ver sonrisas
A JOSU NO LE GUSTA..
No me gusta madrugar para tener que ir a trabajar
No me gusta tener que ir de pie en el tren porque está a tope
No me gusta que el walkman se me quede sin pilas justo cuando acabo de salir de casa
No me gustan la mayoría de las personas con que me cruzo durante el día
No me gusta la programación televisiva actual, da asco
No me gusta María Teresa Campos
No me gusta escuchar las horrendas tertulias matutinas de la radio
No me gusta tener escuchar gilipolleces
No me gusta la gente superficial
No me gustan los libros de Stephen King y demás pseudoescritores
No me gusta que me lleven la contraria
No me gusta reconocer que me he equivocado
No me gusta que haga mucho calor, odio que haga mucho calor
No me gusta hacer deporte, menos aún por qué esté de moda
No me gusta la gente que se mete en la vida de los demás
No me gusta meterme en la vida de los demás
No me gusta que me ignoren
No me gusta que me pregunten siempre todo
No me gustan los prejuicios, pero tengo muchos
No me gustan la estupidez, la soberbia y la ignorancia autocomplaciente
No me gusta que la gente de aquí no sepa amar lo que le rodea
No me gusta discutir por dinero, odio discutir por dinero
No me gusta el dinero
No me gusta pensar que estoy vendiendo mi integridad por un poco de estabilidad
No me gusta la idea de casarme
No me gusta que me digan que soy un hedonista (aunque lo sea)
A OLALLA LE GUSTA..
La vida y sentir que estoy viva, que vibro. Esto es lo que mejor resume todo cuanto en este transcurrir, entre mi nacimiento y el ahora, me gusta.
Darme cuenta de que la vida me empapa, de que me alegran y también me duelen las cosas, de todo cuanto pasa a través de mis sentidos y me produce esa sensación maravillosa de movimiento en mi interior.
Las melancolías, las nostalgias, los recuerdos bellos, los momentos tranquilos que me dedico a mi misma, los otros momentos en que me comparto, las ilusiones, los sueños no alcanzados, las utopías, las verdades (aunque duelan, aún así, las prefiero), las caricias, los abrazos, el contacto humano...
Ir por las calles imaginando versos, canciones, historias, situaciones. Ir por las aceras de siempre soñando que soy en otro lugar y no darme cuenta del camino recorrido ya quinientas mil veces, haciéndome así la rutina más agradable.
Noches que se comparten y que al regresar a casa te dicen lo bien que te encuentras cuando al respirar hondo te invade ese sentimiento indescriptible de satisfacción.
La inconsciencia que me nace con la risa, de repente, cuando las cosas me emocionan. La facilidad de dejarse llevar sin pensar en el después, el "después" ya se verá.
Sonreírme de mi misma.
Lo prohibido, arriesgar, ser valiente, ir hacia delante sin mirara atrás, hacer camino al andar, jugar, saltar, cantar, fo...
Amar a los que tengo cerca, a los que conozco y a los que no. Amar y que me amen. Hacer del amor una religión, una cultura, y pecar siempre por exceso.
Las playas desiertas, los paraísos que me invento y que en algún lugar del mundo, seguro, han de existir...
Los días soleados de verano, tal vez sean mis favoritos porque yo nací en esa época del año o quizás porque es cierto que son los más hermosos o porque la luz es más intensa,... quién sabe.
El Sol, la Luna, las Estrellas, las flores (sobretodo las margaritas), los pájaros. , los arboles de los pájaros, los ríos, los mares, los gatos, el campo, la naturaleza toda...
Escribir mis diarios, derramarme en forma de palabras pese a todo y a todos, plasmar cuanto siento en el momento sin tener que medirme en palabras porque son mías y para mí...
Encender un par de velas, un cigarro, cerrar los ojos escuchar a Silvio, leer, pintar, crear, estar siempre creando algo...
Me gusta hacer el amor, que cada acto sea nuevo y distinto, acariciar como si fuera la primera vez que se acaricia ese cuerpo; buscando siempre nuevos huecos donde descansar, nuevos sabores, nuevos sonidos, nuevos besos... Hacer el amor como si fuese a ser la última vez, desesperadamente hundirme en el placer que eso provoca y dejarme ir sin vergüenzas, sin demoras, sin morales... Saber que en ese momento me descontrolo y no darme cuenta de ello hasta que todo ha terminado... Llorar cuando a veces al llegar tan alto no basta la explosión que en mi cuerpo se provoca y tengo que expresarme ya no en la lágrima sino en un terrible, maravilloso e indescriptible llanto...
Conversar con los amigos, dialogar, discutir si hace falta... Compartir los sentimientos, practica poco habitual. Las relaciones humanas...
La parte de niña que siempre intento conservar, los niños y su forma de ver el mundo, lógica y simple sin las complicaciones que los adultos nos hemos impuesto.
Las tardes de borracheras a lo tonto, las fiestas de cualquier tipo, las celebraciones, los detalles, las sorpresas, las palabras de amor susurradas al oído, los silencios de vez en cuando, las miradas lascivas, las miradas que no lo son, los gestos...
Mirar a los que pasan, fijarme en como andan, en lo que dicen sin decir nada... Encontrarme con alguien conocido por la calle, saber de los viejos amigos, conocer gente cada día...
Me gusta el chocolate, las ensaladas, las pechugas con nata, el caldo gallego de mi madre, el pescado mas que la carne, el helado de fresa, el café, el vino, la pasta cocinada de cualquier forma, la mesa bien decorada, los sabores nuevos y los antiguos...
El agua de la ducha pegandome en la cara, el agua bien caliente incluso en verano. Darme un baño de espuma para relajarme mientras canto algo de Silvio, por supuesto.
Emerger de las profundidades de la bañera, enfundarme el albornoz y tumbarme tranquilamente en el sofá.
Pasear por la ciudad a mi aire sin nadie que me apriete el paso ni que me este esperando cuando me paro ante un escaparate, tomarme mi tiempo para ir de un lado a otro.
Las palabras y todas sus posibilidades, la investigación, el conocimiento, darme cuenta de lo poco que sé y hacer algo por remediarlo...
Estar despierta cuando todos duermen y escribir entonces, entre las sombras y las luces que producen las velas que siempre enciendo.
La educación que he tenido, saber de donde vengo, quienes me preceden, quien he sido, estar orgullosa a pesar de todo de lo que he vivido, ser ingenua como dicen algunas, no arrepentirme de nada porque eso es lo que me hace ser como soy, lo que me conforma...
Hablar sinceramente, sin tapujos, cara a cara. Decir las cosas tal y como te vienen, no tener miedo a ciertas palabras porque todas son iguales.
Creer y tener fe, a pesar de lo visto, en el ser humano. Levantarme cuando me he caído y seguir sonriendo. Saber que el Sol siempre volverá para salvarme...
Son muchas las cosas que me gustan, tantas y tantas que jamás acabaría de describirlas pero lo que mas me gusta de todo es lo que se remonta a la primera frase y lo que resume el resto del escrito. En Vivir se concentra todos mis deseos, todo cuanto me hace sentir viva me gusta.
A OLALLA NO LE GUSTA..
Renunciar a los sueños porque eso significa no estar viva, aunque a veces resulte imposible, procuro en ese caso mutarlos por otros para seguir teniendo sueños e ilusiones que me mantengan.
Juzgar a los demás sin conocerlos, aunque a veces peque de ello. Ser mala persona a conciencia, hacer daño sin inmutarme. Ir por la vida de lo que no soy.
La injusticia manifestada de cualquier forma y en cualquier lugar. Odio, aunque tampoco me guste, la injusticia social, que todo cuanto hay de malo en este planeta que poblamos pueda ser evitado y no se evite... y odio mi reconocida pasividad ante ello, mi cobardía, mi miedo o impotencia para enfrentarme contra la desigualdad, contra los que mandan y deciden... Acatar, bajar la cabeza, doblegarme junto con tantos otros y otras que piensan como yo... La pasividad de las horas que se convierten en días, mese, años y después en toda una vida entera...
No me gusta sentir la indiferencia de nadie, practicarla...
Recordar ciertas cosas, revivirlas...
Sentirme sola de verdad, cuando la soledad no es escogida sino más bien impuesta... No me gusta sentir esa tristeza que queda cuando se está solo, cuando se sabe que otro u otros lo están también...
El sufrimiento de los más pequeños, entendiendo el sufrimiento como algo adulto y duro no como pequeños caprichosy rabietas momentáneos... Su hambre, su explotación, los abusos de cualquier tipo, su mirada profunda de incomprensión, de madurez precoze involuntaria...
La insensibilidad que nos convierte en seres cada vez más individuales, carentes de cualquier tipo de sensibilidad, emociones, en seres totalmente despojados de empatía... Dejarme llevar por esas corrientes bien definidas por aquellos quienes manejan los hilos a su antojo... No ser critica con ellos y sin embargo criticar al que tengo al lado.
Procurar ser cortés cuando realmente me están tocando los ovarios y sonreír como si nada pasase, quedarme quieta al ver que algo esta sucediéndole a otro...
No me gusta que las mujeres tengamos que recorrer la noche con pies de plomo "por si las moscas", que haya tíos por el mundo gracias a los cuales se nos haya vetado a las de mi genero la otra mitad del día... Tener que preocuparme por mi hermana cuando no aparece a su hora de siempre, tener que pensar en lo peor sólo porque no es hombre...
Odio esa puta cultura machista que por desgracia y aunque no se quiera reconocer sigue existiendo a lo largo y ancho de este mundo, en este preciso instante, en este lugar, a mi alrededor... La educación que recibimos sin darnos cuenta y chupamos como decía aquel " tal cual si fuéramos esponjas". Los comentarios de aquellos que ni siquiera conozco y por desgracia tengo que recibir mientras sigo caminando como si nada hubiese oído a pesar de lo que me jode... y todo por no meterme en un lío que de ante mano la fuerza bruta me haría perder... Sentir sus asquerosas palabras, sentirme vejada sólo por ello y no poder hacer que eso termine de ninguna de las formas... Que eso no pueda ser considerado como delito sino como algo que la cultura lleva consigo... es tan fácil para algunos pasar de eso a algo aun peor... Pero en eso jamás un hombre será capaz de darme la razón... para ellos es algo inofensivo...
Tampoco me gustan las tías que juegan a ese juego que por desgracia de las demás existen, sin lugar a dudas...
Las despedidas tristes, los viajes a solas en los que te vas alejando de todo cuanto desearías tener cerca. No cometer locuras porque eso es lo que se espera de ti, ser obediente, no tener voz...
La carencia de romanticismo que por estos días reina sobre nuestro mundo, la perdida de esperanzas, la claudicación, el no intentar nada para no perder lo que se desea...
Que interrumpan mis sueños de manera brusca y me hagan caer contra el suelo sin amortiguar mi caída que es lo mínimo que después de todo podrían hacer...
No me gusta volver la vista atrás y ver que no he avanzado que sigo igual que antes, que no he madurado en todos los aspectos de mi misma. La gente que nunca se mira al espejo y sin embargo siempre siempre miran hacia su ombligo... La gente con la que no puedo compartir algo más allá de lo superficial que de por sí ya conozco a primera vista... darme cuenta de aquellos o aquellas en quien yo confiaba me han traicionado a conciencia... Las mentiras no me gustan porque me producen dolor, rabia, odio...
No me gusta la persona que me enseño a odiar por primera vez de verdad, aunque hoy en día ya le haya perdonado... Enfadarme con alguien a quien quiero...
La gente cruel no me gusta, la que se ríe del que es menos, los que son déspotas, los que no saben disfrutar de la fiesta sin tener que liarla... La prepotencia, el sarcasmo mal entendido, la ironía utilizada para hacer daño... No me gusta tener que ser así cuando hay que defenderse sin pensar en que tal vez esté hiriendo a alguien profundamente e irremediablemente...
No me gusta perder el contacto con aquellos a los que he estado realmente unida en algún momento de mi corta existencia...
No me gusta tener malos sueños, levantarme triste y que no haya nadie para romperme esa tristeza que traigo del sueño...
Pensar en la posibilidad, improbable, de volver a abrazar una última vez a un ser que quise mucho y al que nunca podré contarle mis nuevos planes, mis ideas, mis sentimientos... Pensar en cuanto le hubiese gustado seguir viéndome crecer, pensar que en otra época tal vez hubiese podido hacer más de lo que hice por él... y no saber que hubiese podido pasar si la vida le hubiese otorgado unos años más...
Resumiendo, no me gusta todo aquello que no me haga estar tranquila conmigo misma y con los demás, todo cuanto me aleje de mi religión propia, inventada por mí y para mí.